Reconstrucción de la historia

El 15 de abril de 2019 empezó como cualquier otro día en París, Francia. Pero todo cambió cuando empezó un incendio en la catedral de Notre Dame. Los espectadores se quedaron sin aliento mientras una pieza histórica del país ardía en llamas.

Maddie Shenkan, de 15 años, vivía muy cerca de la catedral en ese momento. El humo del incendio ingresaba en el hogar de su familia. Ella empezó a ver artículos de noticias y tweets en línea sobre el desastre. “Era todo tan irreal”, dijo Maddie a TIME for Kids. “Todo el mundo ya estaba mirando”.

ESPECTÁCULO IMPACTANTE Las personas en París, Francia, se reunieron para ver el incendio del 15 de abril en Notre Dame.

Lo que la historia merece

Notre Dame es una iglesia católica romana icónica. Se encuentra en una isla del Río Sena. La construcción empezó alrededor de 850 años atrás y llevó casi 200 años. Hoy, Notre Dame es uno de los mejores ejemplos de arquitectura gótica. Es conocida por sus arcos imponentes, capiteles puntiagudos y gárgolas espeluznantes.

TRABAJO EN PROGRESO Dos trabajadores cuelgan de un lado de Notre Dame el 2 de julio.

Para la gente de Francia, Notre Dame es mucho más que un lugar de oración. Es un símbolo del país. “Es nuestra historia”, dijo el presidente francés Emmanuel Macron la noche del incendio. “Reconstruiremos a Notre Dame”, prometió, “porque es lo que nuestra historia se merece”.

Macron pidió que Notre Dame sea reconstruida para 2024. Él quería que la catedral se viera más moderna. Pero muchos querían que Notre Dame se viera exactamente igual que antes del incendio. El Senado francés estuvo de acuerdo. El 27 de mayo votó para restaurar Notre Dame a “su último estado visual” antes del incendio.

ESCOMBROS PROBLEMÁTICOS Redes protectoras cuelgan abajo del techo de Notre Dame para atrapar desechos que caigan después del incendio del 15 de abril. Antes de que pueda comenzar la reconstrucción, debe retirarse el resto de los escombros.

Un capítulo nuevo

La restauración solo comienza. Ya ha habido retrasos. El calor del verano causó demasiada sequedad en el techo y piedras se cayeron. Además, las llamas liberaron plomo tóxico en el aire. Esto retrasó la limpieza. El envenenamiento por plomo es aún una preocupación.

MUY ALTO Un trabajador examina una parte abierta del techo, donde empezaron las llamas en Notre Dame. Algunas secciones de la catedral han estado expuestas desde entonces a la lluvia y altas temperaturas.

Los expertos están preocupados también por la estructura frágil de Notre Dame. “La estructura fue debilitada por el fuego”, dice Michel Picaud. Él es el director de la caridad Friends of Notre-Dame de Paris. “Tenemos que asegurar el edificio antes de comenzar a reconstruir”, dice. Esto significa limpiar, proteger y reparar lo que se dañó.

La reconstrucción actual probablemente no empezará hasta la primavera de 2020. Trabajadores de todo el mundo se reunirán para que suceda. Se necesitará esculpir piedra caliza. Se usará para reconstruir las paredes de Notre Dame. Se talarán miles de árboles de roble. Se usarán para reconstruir el techo.

SEGURIDAD Un marco de madera protege la estatua del siglo 14 en una capilla lateral de Notre Dame el 25 de junio. Después del incendio, la estatua se movió fuera de la parte central del edificio para su seguridad.

Esta no es la primera vez que Notre Dame necesita una reparación importante. Ha sobrevivido otros incendios. Fue también dañada durante la Revolución Francesa. Durante los siglos, ha evolucionado y sido remodelada.

Cientos de años de ahora en adelante, la gente mirará hacia atrás al incendio de Notre Dame de 2019. ¿Qué pensarán? “Me gustaría que la gente recordara”, dice Picaud, “que Notre Dame de París empezó un capítulo nuevo en su historia”.

El daño ocurrido

Quinientos bomberos apagaron las llamas en Notre Dame. Les llevó alrededor de nueve horas. Para entonces, la aguja de 300 pies se cayó. Casi dos tercios del techo fueron destruidos. Pero los bomberos pudieron salvar muchos artefactos importantes. Uno es una corona de espinas que se cree que fue usada por Jesús. Los vitrales y órgano de Notre Dame también sobrevivieron.